Y además de esos, ya clásicos, cambios de humor, por no hablar del Helio que parece que le han metido en los mofletes y la tripa, este mes, el pobre a media tarde es como el conejito de Duracell. Se para de golpe y… ploff, no puede seguir.
Lo peor es que a media mañana del día siguiente nos desconcierta viniéndose arriba queriendo hacer planes.
El sábado salimos al campo a buscar setas, y como llegamos un poco tarde, nos pusimos a comer nada más llegar… y claro, después de comer: Switch Off. “Me quiero ir a casa”.
El domingo, como yo tuve que currar, la pobre Eva se lo llevó a un cumple de una amiga de Martina, y lo pasó fatal, y lo peor es también esa sensación que me contaba Eva de no sentirte comprendido porque muy poca gente sabía qué estaba pasando. Y a uno, a estas alturas, tampoco le apetece contar la historia entera a todo el mundo.
Y ayer, convencidos de no salir, cancelamos el plan de ir a ver a unos amigos a la hora de comer, pero Guzmancete se volvió a venir arriba a media mañana, y con su hermana, fabricó un regalo a su amigo Bruno, y dijo que quería ir a dárselo. Total, que fueron a verles, y estuvo bien un buen rato, montando en bici, subiendo a columpios, y de repente… ploff, el conejito deja de tocar el tambor. Y de vuelta a casa en el coche, entre agotado y cabreado, se puso a decir: “Teníamos que estar en casa!!!” que seguramente en nuestro idioma es “Si ya lo sabía yo, no teníamos que haber salido”…
Lo peor es que a media mañana del día siguiente nos desconcierta viniéndose arriba queriendo hacer planes.
El sábado salimos al campo a buscar setas, y como llegamos un poco tarde, nos pusimos a comer nada más llegar… y claro, después de comer: Switch Off. “Me quiero ir a casa”.
El domingo, como yo tuve que currar, la pobre Eva se lo llevó a un cumple de una amiga de Martina, y lo pasó fatal, y lo peor es también esa sensación que me contaba Eva de no sentirte comprendido porque muy poca gente sabía qué estaba pasando. Y a uno, a estas alturas, tampoco le apetece contar la historia entera a todo el mundo.
Y ayer, convencidos de no salir, cancelamos el plan de ir a ver a unos amigos a la hora de comer, pero Guzmancete se volvió a venir arriba a media mañana, y con su hermana, fabricó un regalo a su amigo Bruno, y dijo que quería ir a dárselo. Total, que fueron a verles, y estuvo bien un buen rato, montando en bici, subiendo a columpios, y de repente… ploff, el conejito deja de tocar el tambor. Y de vuelta a casa en el coche, entre agotado y cabreado, se puso a decir: “Teníamos que estar en casa!!!” que seguramente en nuestro idioma es “Si ya lo sabía yo, no teníamos que haber salido”…
Así que hoy tenía muy claro qué hacer. Quedarse en casa. Por la tarde han visto una peli en la tele con las persianas bajadas como si fuera el cine, con palomitas y ¡castañas!, y al terminar… ha vuelto a hacer ploff… y se ha ido a la cama.
En resumen… Dentro de un mes le vamos a decir al Urbasón (corticoide) ADIOS en mayúsculas y cuerpo 47.
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Casita para Bruno en 10 pasos
(Idea de Martina y Guzmán)
1.- Martina corre al cubo de basura de reciclaje. Coge un brick de leche. Y una caja de palomitas de cartón. (Por supuesto ambas ecológicas)
2.- Ambos proponen coger esparadrapo y pegarlas.
3.- Recortan puertas y ventanas.
4.- Prestos y veloces cogen las témperas, se van a la zona de pintar, se ponen la ropa de trabajo y a pintar las cajas por fuera.
5.- Al pintar las cajas, la pintura resbala. Solución: cogen papel, lo pintan, (Guzmán como un descosido con el rodillo de pintar) y las forran.
6.- Guzmán se fija que falta un tejado y coge una pieza de cartón que esta para tirar (ésta no es de nada ecológico, de una batidora en cuestión) y la cortan a modo de tejado.
7.- Guzmán dice que el tejado “lo quiero azul” y lo pinta con el rodillo. Le añade blanco para darle matices.
8.- Pegan el tejado con esparadrapo.
9.- Dejan secar… por suerte la témpera seca rápido, porque quieren salir a toda mecha a…
10.- Regalárselo a Bruno.
¡Pobre Guzmán, suerte que ya falta poco!
ResponderEliminarLa casita es una monada, seguro que a Bruno le encantó el regalo :)
Tus hijos son unos artistas!! (y no lo digo solo por la casita ;)
ResponderEliminarUn abrazo!
Un poquito más y esto ya habrá pasado. Como dice papá, dentro de poco ya le dices adiós a los corticoides y sus malditos efectos.
ResponderEliminarEstos niños prometen...menudo regalazo le han hecho a Bruno.
Un besito familia.
Vamooooooosssssss, un día más es un día menooooosssss!!!!!!! seguimos adelante como un rompehielos!!!!! Bendibesos grandes!!!
ResponderEliminarEs preciosa la casita ecológica de Bruno. Una obra de grandes artistas. Tenía razón SuperGuzmán, ha merecido la pena quedarse en casa para hacer algo tan bonito. Ellos disfrutaron haciéndolo, Bruno estará jugando y nosotros disfrutamos leyéndolo. Un círculo perfecto!
ResponderEliminarÁnimo que el resto pronto pasará.
Un beso grande familia!
es genial la casa!! descansa muchoo Guzmán!! un beso cargado de energías!!
ResponderEliminarBueno, no desespereis, la cuenta atrás ya está en marcha.
ResponderEliminarDentro de poco no tendras que pensar en si tienes que dar explicaciones o no... porque estará todo bien, como con el resto de niños. Así que ánimo para ti también, que a veces se hace mas difícil psicológicamente para los mayores que para los peques.
Y por cierto, la casita que han hecho Martina y Guzman está genial!! y sobretodo coon el cariño que está hecha!!
Un besazo para toda la familia!! Que ya queda poquitooooo!!
¡Qué regalo más lindo!
ResponderEliminarMucho ánimo y energía!!! Ya queda poco...
Un abrazo.
Qué bonita casa!!!
ResponderEliminarSiento estos días, tan alterados por los corticoides y sus efectos colaterales. Debe de haber sido muy duro para todos. Un abrazo muy grande!!!
Vuestra forma de educar a los niños es envidiable. Para mi sois unos maestros y si Guzmán se pone de mal humor es por culpa de los corticoides. Un día más es un día menos!!! Mucho animo
ResponderEliminarBueno, bueno... ¡¡qué éxito!! aquí falta la cara de Bruno, con una sonrrisa de esas que luego dejan agujetas, por que no cabía en sí de gozo... menuda suerte tengo, pensaba, recibir su regalo tan estupendo y encima ¡SORPRESA!!... La ha colocado en un lugar estelar de su habitación, suficientemente cerca para poder cogerla sin ayuda y sificientemente alta para que Drago no la coja para reconvertirla (es un transformer)
ResponderEliminar... y yo veo el principio de un pueblo entero ¿no? ;)
BESÍSIMOS
Bueno, bueno... ¡¡qué éxito!! aquí falta la cara de Bruno, con una sonrrisa de esas que luego dejan agujetas, por que no cabía en sí de gozo... menuda suerte tengo, pensaba, recibir su regalo tan estupendo y encima ¡SORPRESA!!... La ha colocado en un lugar estelar de su habitación, suficientemente cerca para poder cogerla sin ayuda y sificientemente alta para que Drago no la coja para reconvertirla (es un transformer)
ResponderEliminar... y yo veo el principio de un pueblo entero ¿no? ;)
BESÍSIMOS
Es la penúltima, ¡y le queda muy poquito a la cuenta atrás!
ResponderEliminarLuego tocará la fase de terremoto, y qué alegría.
Un abrazo familia, y os mando mucha energía positiva y mis mejores pensamientos para que los últimos coletazos de esta fase pasen rápido y sin dar mucha más lata.
:)
La penúltima!!! eso es lo que hay que pensar, que en un mes como bien dices adiós!!!!! así que mucha energía positiva, y pronto Guzmán estará igual de terremoto todo el día!! Preciosa la casita ecológica!!! me ha encantado!! menudos artistas!! y lo bien que se lo habrán pasado haciendo eso!! Muchos besos y abrazos familia!!
ResponderEliminarUn abrazo gordo!!! Seguro que vienen mejores días!!!
ResponderEliminarPreciosa la casa, los niños más.