Recordad que para que el tren vaya por el camino adecuado hay que llenar el depósito con el mejor carburante posible: Energía Positiva.
Gracias a todos los que nos enviáis a diario decilitros y hectolitros de tan preciado combustible.
A los 3 años, a mi hijo Guzmán le fue diagnosticada una leucemia linfoblástica aguda. Solo le ocurre a 3 niños de cada 100.000, más del 80% sale adelante. En Noviembre del 2012 Guzmán dejó de recibir la última quimio. Este blog fué un motor de ilusión, esperanza y fe con el que todos los que le rodeamos proyectamos y visualizamos el final de este camino en positivo. Hay una energía positiva que movemos entre todos. Solo hay que creer en ella.
"Érase una vez, un niño pequeño, muy pequeño, en medio de un mundo extraño, complicado, donde cada persona creaba otro mundo para huir del real.
Entonces, este niño, tan pequeño pero tan cargado de energía, disipó la oscura neblina que acechaba aquel mundo, mostrando a todos un enorme, brillante y caliente Sol.
Todo ciudadano pudo contemplar un nuevo mundo, todos podian ver sus caras, todos disfrutaban ahora de ese lugar.
Cada uno de los pequeños mundos imaginarios eran olvidados, porque el nuevo mundo tan iluminado era cien mil veces mejor.
Gracias a ese pequeño héroe, uno entre cien mil."
Juan Angel
- Amaya, ¿qué tal en el cole hoy?
- Bien, y ha venido Guzmán, y me he puesto muy contenta de que viniera.
Defensa de la alegría
Defender la alegría como una trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas
defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias
defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres
defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y de la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría
Mario Benedetti
“Efectos secundarios acumulados:
En el niño:
Malestar general, inapetencia, palidez extrema, energía que se agota en 5 minutos, profunda mirada de tristeza, dolor de tripa, más dolor de tripa, más dolor de tripa, mirada perdida, también es habitual no querer estar en otro lugar que colgado en el cuello de su madre y sentado sobre ella todo el día, y por esto entiéndase todo, desde el despertar al acostarse, alto riesgo de que si empieza a llorar no pueda parar, somnolencia, siestas a horas extrañas, tristeza a la hora de comer, nostalgia al ver su tren y no poder jugar con él, apatía, falta de comprensión con respecto a lo que le está pasando…
En la hermana:
Envidia lógica, necesidad de cariño, mimos extremos, ganas de llorar sin poder encontrar causa verbalizada, sensación de abandono, mamitis generalizada, pena, falta de comprensión con respecto a lo que está pasando…
En los padres:
Corre el grave riesgo de que si no se ha leído los posibles efectos secundarios y no se ha preparado para ellos, con coraza indestructible, después de llevar más de un año acumulando emociones fuertes, pueda caer en barrena…, sentir una profunda pena, falta de recursos, desesperación, cambios de humor, descompensación hacia el lado oscuro de la fuerza, focalización excesiva en la tragedia y la pérdida, búsqueda de casos negativos, falta de lucidez, encogimiento del corazón en un porcentaje elevado, absoluta desesperación, profunda sensación de vaciado, necesidad de sentirse abrazado y llorar desconsoladamente…”
"Estoy cantando bajo la lluvia,
simplemente cantando bajo la lluvia.
Qué sensación tan gloriosa,
soy feliz de nuevo,
me estoy riendo de las nubes,
tan oscuras ahí arriba,
el sol está en mi corazón,
y yo estoy preparado para el amor.
Deja que las nubes de tormenta den caza
a todos los que hay aquí,
venid con la lluvia.
Tengo una sonrisa en mi cara,
bajo por la calle
con un estribillo feliz.
Solo cantando,
cantando bajo la lluvia.
Bailando en la lluvia
soy feliz de nuevo,
estoy cantando y bailando bajo la lluvia.
Estoy bailando y cantando bajo la lluvia
¿Por qué estoy sonriendo,
y por qué canto?
¿Por qué septiembre
parece tan soleado en primavera?
¿Por qué me levanto
cada mañana y comienzo el día
feliz y con la cabeza bien alta
con alegria en mi corazón,
por qué cada nueva tarea
me resulta tan facil de llevar a cabo?
Porque estoy viviendo
una vida llena de ti"
Gene Kelly
" Este SuperGuzman puede con todo y más si se le pone un tren a su disposición. Escribo el día 10. Hace un año, este día fue el más doloroso de vuestra vida. Aquella mañana os confirmaron un diagnóstico que nunca hubierais querido escuchar. Comenzabais una etapa de angustias, sufrimientnos e incertidumbres . Ha pasado un año en el que nuestro Guzman se ha ganado a pulso su título de SUPER y en el que vosotros, Eva y tú, habeis dado un ejemplo de vida, de cómo embridar el dolor con mirada positiva y esa actitud vuestra ha hecho mucho bien, ha ayudado a muchas personas. Los cuatro sois una familia admirable. Ya queda menos para el final y lo que resta será mejor. Que Dios os bendiga a vosotros y a esos dos tesoros de hijos- Un besazo"
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Fotografía: "Otoño IV" Autor: Carlos http://losdiasdelalluvia.blogspot.com |
"Queridos amigos:
Llevo días queriendo escribiros este correo, pero no encuentro el momento. Cuando tengo un rato libre, no siempre quiero conectarme de nuevo a la enfermedad y a esta marea de sentimientos en la que estoy, estamos, envueltos y prefiero distraerme.
Quiero agradeceros que estéis ahí. Jose y yo hemos aprendido en este tiempo que no es fácil estar al otro lado, donde estáis vosotros. En estos cuatro meses que llevamos viviendo esta realidad tan indeseable hemos visto de todo, desde el que nos dice “no te preocupes, si hoy en día hay muchos avances y los niños se curan”, hasta el que alecciona con sermones del tipo “tienes que ser fuerte, tu hijo te necesita”.
Pero también hemos tenido varios hombros en los que llorar, amigos que han venido a escuchar nuestras penas, con la valentía del que se atreve a preguntar, de corazón, cómo estamos. Amigos que han hecho repetidas veces de canguro, de transportistas y hasta de peones de mudanzas. Amigos que han subido cafés y desayunos calientes, que han dado conversación o se han puesto a jugar a trenes, e incluso han construido nuevas vías y cocheras. Los hay que han traído un bodymilk de emergencia y un paquete de clínex en la retaguardia por si acaso; o que se han obcecado, casi desde el paritorio, a venir a hacernos compañía; o que han decidido presentar a Guzmán a sus santos predilectos, y se han empeñado en meterle en sus oraciones. Amigos que han decidido guardar nuestro número de teléfono en favoritos, que se han colado en casa para hacer yoga o se han empeñado en sacarnos fuera para la frívola e insustancial tarea de ir de compras a “mirar zapatos” o enseñarnos esa tienda de comida ecológica. Amigos que han venido corriendo si Guzmán llamaba para jugar y leer cuentos, o que han pasado una noche en casa para simular que estábamos “de casa rural” y han tomado una copa de vino con nosotros. Algunos han surgido en el espacio virtual, y nos han hecho llegar dibujos, cuentos, fotografías, poesías, cuadros y hasta galletas de chocolate (nada virtuales y sabrosísimas, por cierto). Otros nos han acompañado en el dolor a través del suyo, y nos han hecho llorar a raudales, nos han dado fuerzas cuando no quedaban, nos han conmovido en lo más profundo. Paloma.
Unos encienden velas, otros han aprendido a meditar, alguno se ha motivado a explorar eso del Reiki, y otros simplemente nos llevan en sus pensamientos y en su corazón.
Yo os quiero escribir para daros las gracias. Gracias por estar ahí, cada uno a vuestra manera, dándonos calor en estos tiempos grises. Da igual cómo lo hagáis. ¡Y Guzmán va a ganar esta batalla, qué cojones!!!!
Abrazos a todos."